Ajustar, posicionar, mover. Los actuadores eléctricos realizan una amplia gama de tareas en una cosechadora. Esto ciertamente aumentará en el futuro. Michaël Carpentier, gerente de desarrollo de productos de New Holland en Zedelgem, Bélgica, se muestra convencido de ello.
Él y su equipo investigan las mejores maneras posibles de que una cosechadora sea todavía más eficiente, más respetuosa con el medioambiente y más cómoda para el operario, para lo cual el uso de actuadores eléctricos será muy importante.
El ajuste de precisión de la máquina es especialmente importante a la hora de dar con las mejores maneras de que la máquina sea rentable, para lo cual un posicionamiento preciso es un aspecto realmente clave. Los actuadores eléctricos LA36 de LINAK pueden ofrecer justamente ese posicionamiento de precisión. Realizan esta tarea considerablemente mejor que los sistemas hidráulicos, en los que la señal y el posicionamiento requieren una complejidad técnica considerable.
Dado que la señal sobre la posición puede facilitarse como señal análoga o digital, la integración en los controles bus puede llevarse a cabo sin ningún tipo de problema.
Una de las principales aplicaciones para un actuador eléctrico en una cosechadora es el sistema de distribución de paja. Bajo previa demanda, las cosechadoras de New Holland se pueden suministrar equipadas con el distribuidor Opti-Spread de paja, el cual va acoplado detrás del picador de paja. El agricultor podrá controlar la anchura y la dirección de la expulsión de paja. Dos potentes discos esparcidores operan con la ayuda de actuadores LA36 de LINAK.
«Utilizamos actuadores eléctricos con mucha frecuencia porque, en contraste con los sistemas hidráulicos, con ellos no hay riesgo de fugas», comenta Michaël Carpentier.
La clave es la robustez
Los actuadores LA36 de LINAK cumplen con los requisitos de solidez y longitud de carrera. Su robusto alojamiento de aluminio y su alto índice de protección (IP66 dinámica, IP69K estática) le permite realizar una amplia variedad de tareas en un gran número de aplicaciones agrícolas.
La robustez no es únicamente una cuestión de protección contra los factores externos como la suciedad, el polvo y el agua.
La fiabilidad operativa es la clave en caso de pudiera producirse algún impacto o vibraciones. Por ejemplo, el LA36 ajusta la configuración del tamiz para la cosecha en una ladera. Dependiendo de la pendiente, el actuador provoca un impacto lateral de tamices, de modo que la trilla siempre pueda producirse en incluso tamices cargados.
«El actuador está constantemente expuesto a vibraciones,» dice Carpentier. « El actuador debe seguir funcionando de manera segura y sin problemas a pesar de la vibración.».
Durante los períodos de desarrollo, LINAK invierte grandes cantidades de tiempo y esfuerzo en pruebas de calidad para los actuadores en una amplia variedad de entornos operativos. Los actuadores deben soportar el calor, el frío, la humedad, los productos químicos y los golpes. Solo después de haber pasado estas pruebas, se les permite entrar en producción y, finalmente, enviarse al cliente.
Dependiendo del modelo, hasta 13 actuadores pueden instalarse en una cosechadora.
Póngase en contacto con el departamento TECHLINE de LINAK® para obtener las especificaciones y más soluciones de actuador para cosechadoras y otros equipos de ganadería y agricultura.
Él y su equipo investigan las mejores maneras posibles de que una cosechadora sea todavía más eficiente, más respetuosa con el medioambiente y más cómoda para el operario, para lo cual el uso de actuadores eléctricos será muy importante.
El ajuste de precisión de la máquina es especialmente importante a la hora de dar con las mejores maneras de que la máquina sea rentable, para lo cual un posicionamiento preciso es un aspecto realmente clave. Los actuadores eléctricos LA36 de LINAK pueden ofrecer justamente ese posicionamiento de precisión. Realizan esta tarea considerablemente mejor que los sistemas hidráulicos, en los que la señal y el posicionamiento requieren una complejidad técnica considerable.
Dado que la señal sobre la posición puede facilitarse como señal análoga o digital, la integración en los controles bus puede llevarse a cabo sin ningún tipo de problema.
Una de las principales aplicaciones para un actuador eléctrico en una cosechadora es el sistema de distribución de paja. Bajo previa demanda, las cosechadoras de New Holland se pueden suministrar equipadas con el distribuidor Opti-Spread de paja, el cual va acoplado detrás del picador de paja. El agricultor podrá controlar la anchura y la dirección de la expulsión de paja. Dos potentes discos esparcidores operan con la ayuda de actuadores LA36 de LINAK.
«Utilizamos actuadores eléctricos con mucha frecuencia porque, en contraste con los sistemas hidráulicos, con ellos no hay riesgo de fugas», comenta Michaël Carpentier.
La clave es la robustez
Los actuadores LA36 de LINAK cumplen con los requisitos de solidez y longitud de carrera. Su robusto alojamiento de aluminio y su alto índice de protección (IP66 dinámica, IP69K estática) le permite realizar una amplia variedad de tareas en un gran número de aplicaciones agrícolas.
La robustez no es únicamente una cuestión de protección contra los factores externos como la suciedad, el polvo y el agua.
La fiabilidad operativa es la clave en caso de pudiera producirse algún impacto o vibraciones. Por ejemplo, el LA36 ajusta la configuración del tamiz para la cosecha en una ladera. Dependiendo de la pendiente, el actuador provoca un impacto lateral de tamices, de modo que la trilla siempre pueda producirse en incluso tamices cargados.
«El actuador está constantemente expuesto a vibraciones,» dice Carpentier. « El actuador debe seguir funcionando de manera segura y sin problemas a pesar de la vibración.».
Durante los períodos de desarrollo, LINAK invierte grandes cantidades de tiempo y esfuerzo en pruebas de calidad para los actuadores en una amplia variedad de entornos operativos. Los actuadores deben soportar el calor, el frío, la humedad, los productos químicos y los golpes. Solo después de haber pasado estas pruebas, se les permite entrar en producción y, finalmente, enviarse al cliente.
Dependiendo del modelo, hasta 13 actuadores pueden instalarse en una cosechadora.
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